Tras la explosiva primera miniserie de Hotwire, “Réquiem
por los muertos”, Steve Pugh (Birmingham, Reino Unido; 1966), retoma en una segunda
entrega, “Corte profundo”, su personaje fetiche. Una pelirroja llamada Alice Hotwire,
de profesión detective exorcista, creada en su día en colaboración con el
guionista Warren Ellis, que vio la luz tras años en un cajón esperando su
turno. La editorial norteamericana Radical, fue la encargada de lanzar este
cómic futurista, repleto de almas en pena, llamadas “luz azul”, que vagan
por la ciudad sin molestar al personal más de lo debido. Ahí es cuando nuestra heroína entrará en
juego.
Tras seis meses, para recuperarse de su anterior aventura,
Alice, se verá envuelta de nuevo en un caso, gracias a la insistencia de su
compañero de la policía metropolitana, el duro de Peter Mobey. Siendo testigo de
una persecución por la autopista de un un prototipo militar de la serie Alfa, bajo el seguimiento de la
policía, provocando un accidente con unas consecuencias fatales para una mujer
embarazada. No se percatará de la gravedad, hasta que el causante, Thomas
Epping (un un soldado caído hace unos meses), intentará ayudar salvar la vida más
preciada que hay dentro de Eva, llevándola hasta la ciudad más cercana. Una
ciudad protegida por una importante compañía de seguridad de nivel militar:
Bear Claw, (comandada por un tal Rantz), con la que tendrá que lidiar Hotwire, para
intentar para por todos los medios resolver la peliaguda situación en la que se
encuentran Tom y Eva, la de una persecución mortal.
Steve Pugh en “Corte
profundo”, está influenciada por revistas como 2000 AD, en el
que aparecían personajes tan duros como Juez Dredd. Casi con un estilo
cinematográfico, el autor nos plantea una historia trepidante, llena de giros argumentales, con el que sorprender al lector más exigente.
En el apartado artístico, plantea una narración poco convencional, con unos acabados sobresalientes, embellecidos por un color muy intenso, y lleno de fuerza.
En cuanto a la edición de Dolmen, poco que objetar, para
una publicación muy cuidada en cuanto a formato, papel e impresión. Tan sólo
una pequeña errata (que no afecta a la lectura para nada), un recuadro en
amarillo, en la que falta el texto de la traducción, que a buen seguro en una
segunda edición se subsanará.
Sinceramente, Hotwire es un cómic de ciencia ficción muy
entretenido, para los amantes de las historias de fantasmas y seres
paranormales. ¡No se la pierdan!
“Hotwire. Corte profundo”
Guión y dibujos: Steve Pugh
Editorial: Dolmen Editorial
Formato: cartoné, 96 páginas, 17 x 26 cm, color
Edición original: Hotwire: Deep cut 1 a 3, Radical Publishing
Traducción: Ángel Mirou
PVP: 15 €
Valoración: *** ½
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